Por primera vez, una combinación de la técnica de los insectos estériles (TIE) y la técnica de los insectos incompatibles (TII) ha conseguido reducir con éxito poblaciones de mosquitos, un prometedor paso adelante en el control de los mosquitos que transmiten el dengue, el virus del Zika y muchas otras enfermedades devastadoras. Los resultados del ensayo piloto, realizado recientemente en Guangzhou (China) con el apoyo del OIEA en cooperación con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se publicaron en Nature el 17 de julio de 2019.
La TIE es un método de control de plagas de insectos respetuoso con el medio ambiente que implica la cría en masa y la esterilización, por medio de la radiación, de los insectos causantes de una plaga concreta. Una vez esterilizados, se procede a la suelta zonal sistemática de los machos desde el aire en unas zonas definidas. Los machos estériles se aparean con hembras silvestres sin que haya descendencia, con lo que la población causante de la plaga se reduce paulatinamente. La TII implica la exposición de los mosquitos a la bacteria Wolbachia, que los esteriliza parcialmente, lo que significa que se necesita menos radiación para esterilizarlos completamente. Esto, a su vez, preserva mejor la competitividad de apareamiento de los machos esterilizados.
Aunque la TIE se ha utilizado con éxito como parte de las estrategias de gestión zonal de insectos para controlar una serie de plagas que afectan a las plantas y al ganado, tales como la mosca de la fruta y las polillas, aún ha de demostrarse su eficacia para controlar a los mosquitos.
El principal obstáculo al ampliar el uso de la TIE para combatir distintas especies de mosquitos ha sido superar varios desafíos técnicos relacionados con la producción y la suelta de machos estériles en cantidad suficiente para abrumar a toda la población fértil silvestre. Investigadores de la Universidad Sun Yat‑sen y sus asociados, en China, han afrontado con éxito estos desafíos, gracias al apoyo de la División Mixta FAO/OIEA de Técnicas Nucleares en la Alimentación y la Agricultura, que dirige y coordina la investigación mundial sobre la TIE.
Por ejemplo, para criar cada semana a más de 500 000 mosquitos, los investigadores usaron unos bastidores fabricados a partir de modelos elaborados por los laboratorios de la División Mixta FAO/OIEA, situados cerca de Viena (Austria). La División Mixta y los investigadores también trabajaron en estrecha colaboración para desarrollar y probar con éxito un irradiador especializado para tratar lotes de 150 000 pupas de mosquito.