El apoyo se está prestando a través de un proyecto de cooperación técnica del OIEA aprobado en noviembre de 2019, cuyo objetivo era agilizar la respuesta del OIEA a las crecientes solicitudes de asistencia de los Estados Miembros para hacer frente a brotes de enfermedades (como el ébola en África, la gripe aviar en Asia, la dermatosis nodular contagiosa en Europa y la enfermedad por el virus del Zika en América Latina), así como a las consecuencias de catástrofes naturales devastadoras (como grandes terremotos e inundaciones).
“El proyecto se estableció como canal para facilitar rápidamente apoyo y equipo fundamentales a las instituciones pertinentes en caso de emergencia”, explica Emma Webb, Jefa de la Sección de Estrategias y Asociaciones del Departamento de Cooperación Técnica del OIEA. “En aquel momento nadie se imaginaba que había una pandemia mundial a la vuelta de la esquina y que este proyecto resultaría tan estratégico para prestar la asistencia necesaria.”
Con la aparición de la COVID-19, este se ha convertido en el mayor proyecto de la historia del programa de cooperación técnica del Organismo y ha movilizado hasta la fecha 25,7 millones de euros en financiación extrapresupuestaria para enviar lotes completos de equipo de detección a países de todo el mundo. Estos lotes incluyen artículos como aparatos de RT-PCR en tiempo real y kits, reactivos y material fungible de laboratorio, además de material de bioseguridad, como equipos de protección personal y cabinas de laboratorio, que se emplean en el manejo, el almacenamiento y el análisis seguros de las muestras recogidas. Los nuevos equipos y material fungible están llegando periódicamente a instituciones médicas y veterinarias, así como a otros laboratorios e instalaciones de diagnóstico.
Además, el personal de laboratorios nacionales de todo el mundo está recibiendo capacitación a través de seminarios web y videos promovidos por los programas de salud humana y alimentación y agricultura del OIEA. El OIEA, en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, está ofreciendo a laboratorios médicos y veterinarios orientaciones sobre la detección de la COVID-19, entre ellas, procedimientos operacionales normalizados para detectar el virus siguiendo las recomendaciones de la OMS.