La protección radiológica y la braquiterapia

En la braquiterapia se colocan pequeñas fuentes radiactivas selladas directamente en el volumen de tejido que se tratará o en la zona adyacente. La braquiterapia permite aplicar altas dosis de radiación de forma localizada a un tumor y que la dosis que reciben los demás tejidos sea mucho menor. Por lo general, este tipo de tratamiento solo se utiliza para tumores pequeños y bien circunscritos.

Entre los tipos de braquiterapia pueden mencionarse la intracavitaria, en la que las fuentes se colocan en una cavidad anatómica, y la intersticial, en la que las fuentes se implantan dentro del volumen tumoral. Los tratamientos con braquiterapia pueden ser temporales, si la dosis se administra durante un período breve, o permanentes, si la dosis se aplica durante toda la vida útil de las fuentes radiactivas.

¿Qué aspectos de la seguridad radiológica son importantes en la braquiterapia?

  • Asegurarse de optimizar la protección durante el tratamiento. 
  • Adoptar medidas para evitar las exposiciones accidentales a la radiación. 

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