La protección radiológica del personal médico que hace las absorciometrías de rayos X de doble energía
Preguntas frecuentes de los profesionales de la salud
» ¿Cuáles son las dosis de radiación que por lo general recibe el personal durante las absorciometrías de rayos X de doble energía (DXA)?
» ¿Tener una oficina ubicada junto a las salas en las que se efectúan las DXA debe ser un motivo de preocupación?
» ¿El diseño de los aparatos de DXA influye sobre las dosis de radiación que recibe el personal?
» ¿El personal que trabaja en las salas de DXA debe utilizar dosímetros personales?
» ¿Se debe recibir capacitación especial para operar los equipos de DXA?
» ¿Los operarios que efectúan las DXA deben colocarse delantales de plomo?
» ¿Las empleadas embarazadas pueden seguir trabajando en las salas en que se hacen las DXA?
» ¿Cuáles son las dosis de radiación que por lo general recibe el personal durante las absorciometrías de rayos X de doble energía (DXA)?
Por lo general, el personal que trabaja en las salas de DXA recibe dosis de radiación pequeñas. Sin embargo, los avances más recientes en la tecnología de DXA (configuraciones con haces en abanico, haces cónicos y arcos del intensificador de imágenes) pueden dar lugar a un aumento de los niveles de exposición a la radiación dispersa. Durante algunos análisis los operarios suelen permanecer dentro de la sala de estudios, por lo que, al valorar los niveles de dosis ocupacionales debe tenerse en cuenta la radiación dispersa procedente de la carga total de trabajo anual con los pacientes. Según informes, las tasas de dosis de radiación dispersa cuantificadas a 1 m de distancia del eje central de la mesa de exploración abarcan desde unas pocas décimas de μSv/h hasta 5 μSv/h, en función del modelo de equipo que se utilice. A partir de estos valores, cálculos y mediciones recientes indican que, para un volumen de trabajo promedio (20 pacientes por día), la dosis anual cuantificada a 1 m de distancia del equipo se encuentra entre 0,1 y 1,5 mSv, en función del modelo del equipo que se utilice. Para hacer los cálculos se da por sentado que el personal no permanece con los pacientes pediátricos para calmarlos o sujetarlos durante los estudios, y que son los padres o algún cuidador quien lo hace.
En términos prácticos, la consola del operario debe ubicarse por lo menos a 1 m de distancia de los sistemas de haz concentrado, y a por lo menos 2 m de los sistemas de haz en abanico. En algunos modelos más antiguos, poco frecuentes en la actualidad, la distancia debe ser de 3,5 m. En el caso de los equipos que funcionan con haces en abanico o cónicos, o cuando no sea posible mantener las distancias recomendadas, debe pensarse en la posibilidad de utilizar biombos protectores. Si se adoptan esas precauciones, cabe esperar que las dosis de radiación que reciben los operarios se encuentren en el extremo inferior de los intervalos de exposición admisibles para el personal.
» ¿Tener una oficina ubicada junto a las salas en las que se efectúan las DXA debe ser un motivo de preocupación?
Si los establecimientos en los que se efectúan las DXA están bien diseñados y cuentan con salas de tamaño adecuado, los niveles de radiación registrados en las habitaciones contiguas serán aceptables para el público. Por lo general no es necesario colocar blindaje complementario en las paredes. Los niveles de radiación que reciben las personas que se encuentren en las habitaciones contiguas dependerán del volumen de trabajo, el tipo de equipo de DXA, la distancia entre el eje de la mesa de exploración y las paredes, y la composición de los muros. En algunos casos, si la distancia que hay desde el eje de la mesa hasta la pared adyacente es menor a 1 m, puede ser necesario colocar más blindaje contra la radiación. Si las paredes de la sala en la que se efectúa la DXA son macizas (es decir, se construyeron con hormigón o ladrillo macizo en lugar de ladrillos huecos o mamparas) o si el escritorio de la oficina contigua está situado a más de 2 m de del equipo de DXA, cabe esperar que la dosis de radiación se mantenga dentro de niveles aceptables. No obstante, en el momento de la instalación y la puesta en servicio de los aparatos deben calcularse las dosis de radiación sobre la base de cuantificaciones. Siempre que sea posible debe solicitarse el asesoramiento de un experto en protección radiológica.
» ¿El diseño de los aparatos de DXA influye sobre las dosis de radiación que recibe el personal?
Sí.
Se ha demostrado que los aparatos modernos de haz en abanico y haz cónico producen más radiación dispersa que los antiguos sistemas de DXA de haz concentrado. La radiación dispersa se expresa en función de la dosis anual prevista a 1 m de distancia de la mesa de exploración (con el volumen de trabajo esperado). Los equipos de DXA con diseños más recientes que cuentan con un arco del intensificador de imágenes permiten tomar proyecciones radiográficas laterales, lo que también puede producir un aumento de la radiación dispersa. Aunque todos los sistemas de DXA producen niveles relativamente bajos de radiación dispersa, es una variable que no debe pasarse por alto. En el caso de los sistemas de haz en abanico y haz cónico, es posible que sea necesario colocar blindaje complementario si el operario tiene que permanecer cerca de la mesa de exploración o si las paredes están cerca de esta.
» ¿El personal que trabaja en las salas de DXA debe utilizar dosímetros personales?
La respuesta depende de la reglamentación nacional. En algunos países es obligatorio que todos los trabajadores sometidos a exposición ocupacional, que por lo general trabajan en zonas controladas, lleven un dosímetro personal u otro dispositivo con el fin de vigilar su exposición individual. En algunos casos puede ser más adecuado hacer mediciones en el lugar de trabajo. La exposición ocupacional de los operarios dependerá del tipo de tecnología del equipo, el volumen de trabajo y la ubicación relativa del sistema con respecto a la mesa de exploración. Si desea obtener más información, sírvase consultar las recomendaciones relativas a la vigilancia individual que figuran en las Normas Básicas Internacionales de Seguridad del OIEA.
» ¿Se debe recibir capacitación especial para operar los equipos de DXA?
La respuesta depende de la reglamentación nacional. Aunque las DXA son procedimientos diagnósticos que utilizan dosis de radiación relativamente bajas, debido a que la protección radiológica es objeto de reglamentación en algunos países puede ser necesario que el personal reciba capacitación oficial en esa esfera. Además, debe obtenerse capacitación específica (por parte del proveedor o fabricante) sobre el funcionamiento del sistema concreto de DXA que se utiliza.
» ¿Los operarios que efectúan las DXA deben colocarse delantales de plomo?
No.
No es necesario que los operarios permanezcan cerca del equipo de DXA durante los estudios. En investigaciones se ha demostrado que, por lo general, en el caso de los equipos de haz concentrado la zona controlada puede restringirse a 1 m alrededor de la mesa, y con los equipos de haz en abanico, a 2 m. Si por razones prácticas no es posible mantener esas distancias, podrá ser necesario utilizar biombos corredizos o colocar blindaje estructural. Puede lograrse un nivel adecuado de protección radiológica si se mantiene una distancia suficiente entre el operario y el paciente, si se utilizan biombos de acrílico al plomo fijos o corredizos, o una combinación de ambas opciones. Independientemente de los requisitos de blindaje, el personal debe observar buenas prácticas de protección radiológica y reducir al mínimo el tiempo que permanece cerca del equipo de DXA y los pacientes durante la exposición a la radiación. En caso de que haya dudas, debería solicitarse el asesoramiento de un experto en protección radiológica.
» ¿Las empleadas embarazadas pueden seguir trabajando en las salas en que se hacen las DXA?
Las trabajadoras que se embaracen deben comunicarlo a sus empleadores. Las empleadas gestantes pueden seguir trabajando en las salas en las que se hacen las DXA siempre y cuando las dosis de radiación que reciba el feto se mantengan por debajo de 1mGy durante todo el embarazo.
Si desea obtener información complementaria, sírvase consultar:
- LARKIN, A., SHEAHAN, N., GRAY, L., O’CONNOR, U., DOWLING, A., VANO, E., TORBICA, P., SALAT, D., SCHREINER, A., NEOFOTISTOU, V., MALONE, J.F., Commissioning and Quality Assurance of Dual Energy X-ray Absorptiometry (DEXA) systems, Rad. Prot. Dosim. 2008 (in press).
- NJEH, C.F., FUERST, T., HANS, D., BLEKE, G.M., GENANT, H.K., Radiation exposure in bone mineral assessment, Appl. Radiat. Isot. 50 (1999) 215-236.
- PATEL, R., BLAKE, G.M., BATCHELOR, S., FOGELMAN, I., Occupational dose to the radiographer in dual X-ray absorptiometry: A comparison of pencil-beam and fan-beam systems, Br. J. Radiol. 69 (1996) 539-543.
- SHEAHAN, N.F., DOWLING, A., O'REILLY, G., MALONE, J.F., Commissioning and quality assurance protocol for dual energy X-ray absorptiometry systems, Rad. Prot. Dosim. 117 (2005) 288-290.
- STEEL, S.A., BAKER, A.J., SAUNDERSON, J.R., An assessment of the radiation dose to patients and staff from a Lunar Expert-XL fan beam densitometer, Physiol. Meas. 19 (1998) 17–26.