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La Declaración sobre las Salvaguardias en 2018 señala que sigue aumentando la cantidad de materiales nucleares sometidos a las salvaguardias del OIEA

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Inspectores de salvaguardias del OIEA reciben capacitación para llevar a cabo actividades de verificación. Según la Declaración sobre las Salvaguardias en 2018, aumentó la cantidad de actividades de verificación sobre el terreno que se llevan a cabo en todo el mundo. (Fotografía: D. Calma/OIEA)

Según la Declaración sobre las Salvaguardias en 2018, publicada la semana pasada, en 2018 aumentó la cantidad de materiales nucleares sometidos a las salvaguardias del OIEA, manteniéndose así la tendencia de los años anteriores.

El OIEA trata de verificar que los Estados de todo el mundo utilizan los materiales nucleares exclusivamente con fines pacíficos. Para ello, aplica una serie de medidas técnicas conocidas como salvaguardias. El Organismo informa cada año de sus conclusiones a la Junta de Gobernadores por medio del Informe sobre la Aplicación de las Salvaguardias, en el que se basa la Declaración sobre las Salvaguardias. En 2018, el OIEA realizó 3011 actividades de verificación sobre el terreno en todo el mundo, lo que supone un incremento con respecto a las 2843 de 2017. Estas actividades incluyeron 183 visitas de acceso complementario, por 140 en 2017. Las visitas de acceso complementario permiten al OIEA entrar en un lugar en un plazo de 24 horas y, en algunos casos, con solo dos horas de preaviso.

Durante el año también aumentó el número de instalaciones nucleares y de lugares situados fuera de las instalaciones que fueron objeto de actividades de verificación por parte de los inspectores de salvaguardias, hasta alcanzar las 1314 en todo el mundo.

Según Massimo Aparo, Director General Adjunto y Jefe del Departamento de Salvaguardias del OIEA, “desde 2010, la cantidad de materiales sometidos a salvaguardias se ha incrementado en un 24 %. Gracias a las minuciosas actividades de verificación que lleva a cabo el OIEA, y que se resumen en el Informe sobre la Aplicación de las Salvaguardias, podemos seguir respondiendo al desafío de proporcionar a la comunidad internacional unas conclusiones de salvaguardias creíbles”.

En el Informe sobre la Aplicación de las Salvaguardias más reciente se señaló que en 2018 se aplicaron salvaguardias en 182 Estados, de los cuales 174 contaban con acuerdos de salvaguardias amplias, 3 con acuerdos específicos para partidas y 5 con acuerdos de ofrecimiento voluntario. El tipo de conclusión que extrae el OIEA respecto de cada Estado varía en función del tipo de acuerdo de salvaguardias concertado entre el Estado y el Organismo.

En 2018, de los 174 Estados con acuerdos de salvaguardias amplias en vigor, 129 tenían además un protocolo adicional en vigor. Los protocolos adicionales proporcionan acceso a más información, emplazamientos y lugares, lo que permite al OIEA ofrecer garantías de la ausencia de actividades y materiales nucleares no declarados, así como de la no desviación de materiales nucleares declarados de las actividades nucleares con fines pacíficos.

En cuanto a los Estados con acuerdos de salvaguardias amplias en vigor, el OIEA pudo concluir que, en 70 de ellos, “todos los materiales nucleares seguían adscritos a actividades con fines pacíficos” y que, en los 104 restantes, “los materiales nucleares declarados seguían adscritos a actividades con fines pacíficos”.

Con respecto a los tres Estados con acuerdos de salvaguardias específicos para partidas en vigor (la India, Israel y el Pakistán), el OIEA llegó a la conclusión de que “los materiales, instalaciones u otras partidas nucleares a los que se habían aplicado salvaguardias seguían adscritos a actividades con fines pacíficos”.

En el caso de los cinco Estados con acuerdos de ofrecimiento voluntario en vigor (China, Francia, el Reino Unido, Rusia y los Estados Unidos), el OIEA llegó a la conclusión de que “los materiales nucleares presentes en las instalaciones seleccionadas que habían sido sometidos a salvaguardias seguían adscritos a actividades con fines pacíficos o se les había dejado de aplicar las salvaguardias conforme a lo previsto en los acuerdos”.

Para el Sr. Aparo, “la extracción de conclusiones es un aspecto esencial de las salvaguardias. Tras evaluar toda la información de importancia para las salvaguardias, en particular la recopilada durante las inspecciones sobre el terreno y los análisis llevados a cabo en nuestra Sede, en el Informe sobre la Aplicación de las Salvaguardias comunicamos nuestras conclusiones a los Estados Miembros”.

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