En vista de los cientos de reactores nucleares, reactores de investigación e instalaciones del ciclo del combustible que hay en funcionamiento en todo el mundo, el terrorismo nuclear y demás amenazas para la seguridad física nuclear exigen una atención constante. El OIEA contribuye a garantizar que se adopten medidas encaminadas a controlar y proteger las instalaciones nucleares de esas amenazas.
Aspectos de seguridad física de las instalaciones nucleares
La seguridad física nuclear se define como la prevención y detección de robos, actos de sabotaje, accesos no autorizados, transferencias ilegales u otros actos dolosos relacionados con materiales nucleares, otras sustancias radiactivas o instalaciones conexas, y la respuesta a esos actos.
Teniendo en cuenta los importantes volúmenes de materiales nucleares y otros materiales radiactivos en tránsito y almacenamiento, la mejora de la protección física es una medida preventiva fundamental contra los actos de robo y sabotaje. La protección física requiere una combinación de equipos informáticos (dispositivos de seguridad física), procedimientos (la organización del personal de guardia y el desempeño de sus funciones) y el diseño de las instalaciones (incluida su configuración).
Un sistema de protección física se considera eficaz cuando tiene en cuenta la instalación nuclear en particular, el tipo de materiales nucleares utilizados en ella y la amenaza, así como las consecuencias (radiológicas o de otro tipo), que se plantearían si la prevención fallase. Es fundamental que en el diseño del sistema de protección física se aplique un enfoque graduado con mayores niveles de defensa. Las vulnerabilidades en las instalaciones nucleares pueden exponerlas a actos dolosos y crear situaciones propicias para terroristas o grupos delictivos.
El OIEA trabaja para contribuir a los esfuerzos mundiales encaminados a lograr una seguridad física eficaz dondequiera que se utilicen, almacenen o transporten materiales nucleares u otros materiales radiactivos, así como en las instalaciones vinculadas a esas actividades. El Organismo presta apoyo a los Estados Miembros en sus esfuerzos por cumplir sus responsabilidades nacionales y sus obligaciones internacionales, reducir los riesgos y hacer frente a las amenazas de manera adecuada.
Previa solicitud, el OIEA presta asistencia para mejorar la protección física de los materiales nucleares y otros materiales radiactivos y las instalaciones conexas, lo que es necesario para garantizar la eficacia de los sistemas de protección física contra amenazas definidas. Esas mejoras abarcan todas las funciones principales del sistema de protección física, a saber, la detección, la demora y la respuesta. El Organismo también imparte capacitación para el personal especializado y presta asistencia en la transferencia de conocimientos técnicos y especializados entre los Estados Miembros.