El OIEA participa activamente en las actividades encaminadas a ayudar a la comunidad internacional a alcanzar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) aprobados en la cumbre de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible, que se celebró en Nueva York en septiembre de 2015. Con estos Objetivos y sus metas correspondientes se intenta estimular la adopción de medidas durante los próximos 15 años en esferas de importancia decisiva para la humanidad y el planeta. Los ODS combinan de manera equilibrada las tres dimensiones del desarrollo sostenible: la económica, la social y la medioambiental.
El apoyo del OIEA a los países en la utilización de técnicas nucleares e isotópicas contribuye a la mayoría de dichos Objetivos. A continuación se muestra una selección de los Objetivos a los que el OIEA contribuye de manera directa y el modo en el que se lleva a cabo dicha contribución.
Hambre Cero
El hambre y la malnutrición suelen tener su origen en la inseguridad alimentaria y los desafíos agrícolas, que afectan negativamente al bienestar y lastran las economías. Varios países están mejorando la seguridad alimentaria y la agricultura mediante el uso de técnicas nucleares e isotópicas a través del OIEA y su alianza con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura (FAO). Estas técnicas se utilizan con una variedad de finalidades: desde la conservación de los recursos hídricos, del suelo y de los cultivos, hasta la protección de las plantas frente a plagas de insectos y la obtención de nuevas variedades vegetales con características convenientes. Otros países utilizan las técnicas nucleares para proteger la salud del ganado y mejorar su eficiencia reproductiva. Las técnicas nucleares pueden utilizarse para garantizar una vida más larga en estante, y una mayor inocuidad y calidad de los productos alimenticios destinados al consumo.
Los instrumentos nucleares se utilizan también en varios Estados Miembros para estudiar la composición corporal y la absorción de nutrientes a fin de investigar más a fondo y de mejorar los programas de nutrición que se centran en la malnutrición en todas sus formas, desde la desnutrición a la obesidad.
Salud y bienestar
La consecución del desarrollo sostenible no es posible si la salud se resiente. Mediante la asistencia prestada para conseguir la meta de los ODS de reducir en un tercio la mortalidad por enfermedades no transmisibles, como el cáncer, el OIEA puede también prestar asistencia a países para que elaboren programas integrales de control del cáncer y mejoren el acceso a los cuidados, tanto a través del establecimiento de servicios e instalaciones de medicina radiológica como de la enseñanza y capacitación de profesionales sanitarios especializados. Estos servicios dependen de la labor del OIEA de mejorar la disponibilidad y la utilización segura de radioisótopos de uso médico que salvan vidas, y pueden utilizarse para supervisar y evaluar otros problemas de salud, como enfermedades cardiovasculares o la tuberculosis.
Muchos países se dirigen al OIEA cuando afrontan enfermedades que pueden transmitirse de animales a seres humanos, como la enfermedad por el virus del Ébola, a fin de obtener apoyo en la utilización de instrumentos de diagnóstico y supervisión derivados de la esfera nuclear para su detección precoz y el control de su propagación.
Agua limpia y saneamiento
No hay vida sin agua. El aumento de la población y el crecimiento económico hacen que el acceso a agua limpia y salubre sea imperativo. Las técnicas isotópicas arrojan luz sobre la edad y la calidad del agua. Algunos países se sirven de ellas para poner en práctica planes de gestión integrada de los recursos hídricos encaminados a utilizar de manera sostenible los recursos y proteger el agua y los ecosistemas relacionados con ella, mientras que otros las emplean para hacer frente a la escasez, mejorar el suministro de agua dulce y asegurar su uso eficiente.
Otro problema asociado al progreso social es la contaminación del agua. Con apoyo del Organismo, algunos países están tratando con radiación las aguas residuales resultantes de actividades industriales, a fin de reducir los contaminantes y mejorar la calidad del agua, de modo que sea más seguro reutilizarla.
Energía Asequible y no contaminante
El acceso a una energía limpia, fiable y asequible es un requisito previo para un crecimiento económico sostenible y un mayor bienestar de las personas. Para promover la utilización segura y eficiente de la energía nucleoeléctrica, el OIEA apoya los programas nucleares existentes y nuevos en todo el mundo, cataliza la innovación y crea capacidad en materia de planificación y análisis energéticos, así como de gestión de la información y los conocimientos nucleares. Muchos países también colaboran con el OIEA para satisfacer sus crecientes demandas de energía para el desarrollo en condiciones de seguridad tecnológica y física, además de para, al mismo tiempo, mejorar la seguridad energética, reducir los efectos en la salud y el medio ambiente de la producción de energía y mitigar el cambio climático.
Industria, innovacióne infraestructura
El éxito de una economía fuerte, tanto en países desarrollados como en países en desarrollo, se sustenta en una tecnología industrial de vanguardia. Concretamente, la ciencia y la tecnología nucleares pueden contribuir notablemente al crecimiento económico y desempeñar una importante función en el apoyo al desarrollo sostenible. Con ayuda del OIEA, algunos países han aumentado la competitividad de sus industrias mediante la utilización de tecnologías nucleares para llevar a cabo pruebas de seguridad y calidad, así como a través de la aplicación de técnicas de irradiación para mejorar la durabilidad de los productos. La irradiación también mejora la sostenibilidad de las industrias, ya que ayuda a reducir el impacto ambiental de su producción.
Acción por el clima
La ciencia nuclear, incluida la energía nucleoeléctrica, puede desempeñar un importante papel en la mitigación del cambio climático y la adaptación a sus efectos. El OIEA procura crear conciencia a escala mundial sobre la función que la energía nucleoeléctrica puede desempeñar y desempeña en relación con el cambio climático y en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. La energía nucleoeléctrica es una de las tecnologías que permiten generar electricidad con menos emisiones de carbono. El OIEA también presta asistencia a los países en la utilización de técnicas nucleares para mitigar las consecuencias del cambio climático y adaptarse a ellas mediante la gestión de los recursos hídricos, del suelo y de los cultivos. Las investigaciones científicas que utilizan instrumentos nucleares, llevadas a cabo con apoyo del OIEA, también contribuyen a la ejecución de políticas y medidas basadas en la ciencia para hacer frente a los efectos de un clima cambiante.
Vida submarina
Los océanos contienen vastos ecosistemas rebosantes de vida marina, que son un recurso vital para la gente cuyo medio de vida es el que obtiene de él o para su alimentación diaria. A fin de proteger y gestionar de manera sostenible los océanos y, además, apoyar a las comunidades costeras, muchos países están utilizando técnicas nucleares e isotópicas, con apoyo del OIEA, para entender y vigilar mejor la salud de los océanos y fenómenos marinos como la acidificación oceánica o las floraciones de algas nocivas. Las redes de laboratorios nacionales, regionales e internacionales establecidas por el OIEA también constituyen una vía que distintos países tienen a su alcance para la colaboración científica y proporcionan recursos clave para analizar y vigilar los contaminantes marinos.
Vida de ecosistemas terrestres
La desertificación, las tierras degradadas y los suelos erosionados pueden poner en peligro las vidas y los medios de subsistencia de las personas. Las técnicas isotópicas proporcionan una evaluación exacta de la erosión del suelo y los focos críticos de erosión. Estas evaluaciones pueden contribuir a revertir la degradación de la tierra y a restaurar los suelos, lo que también ayuda a detener la pérdida de biodiversidad.
Muchos países utilizan técnicas nucleares, a través del apoyo prestado por el OIEA, para recopilar información esencial que ayude a definir unas prácticas agrícolas que permitan un uso de la tierra más sostenible, lo que, a su vez, de lugar a mayores ingresos. Esa información también apoya la mejora de los métodos de conservación para proteger y restaurar recursos y ecosistemas.
Alianzas para lograr los objetivos
Las asociaciones ayudan a ampliar el acceso a la ciencia y la tecnología para la consecución de los ODS. La estrecha colaboración entre el OIEA, organizaciones de las Naciones Unidas como la FAO y la Organización Mundial de la Salud y otras organizaciones internacionales y de la sociedad civil ayuda a maximizar la contribución del apoyo del OIEA a la consecución de las prioridades de desarrollo de los países. Muchos países actúan mediante proyectos de cooperación regional e interregional y acuerdos con el OIEA para mejorar sus conocimientos, obtener acceso a tecnología y equipo y desarrollar las mejores prácticas para promover el desarrollo sostenible, la investigación y la innovación. Este marco también hace posible que especialistas de distintos países colaboren con asociados del OIEA, incluida una red mundial de instituciones de recursos regionales y centros colaboradores. Muchos de estos esfuerzos se organizan a través del OIEA y su programa de cooperación técnica, sus laboratorios especializados y sus actividades coordinadas de investigación.
(Este artículo apareció en el Boletín del OIEA, septiembre de 2016)