Los cables rojos utilizados en el compartimento de este motor fueron producidos por Wonderful Ebeam Cable y se volvieron termorresistentes e ignífugos mediante su tratamiento por irradiación en Nuklear Malaysia. (Fotografía: M. Gaspar/OIEA)
La reticulación también se puede conseguir mediante productos químicos, pero ese proceso requiere temperaturas más elevadas. La alternativa, la irradiación de polímeros, hace que se formen uniones permanentes entre las cadenas de polímeros a temperatura ambiente, lo que comporta menores gastos de explotación y un proceso más respetuoso con el medio ambiente.
En Malasia, ninguna PYME posee la tecnología necesaria para efectuar esa irradiación, y los bancos son reacios a conceder préstamos para la adquisición de equipo de irradiación, asegura Chang Choy. “Son máquinas caras y los bancos no aceptan el propio equipo como garantía porque no existe un mercado de equipo de irradiación de segunda mano, por lo que no podrían venderlo si mi empresa quebrase.”
Aquí entra en juego Nuklear Malaysia, que irradia los productos de empresas pequeñas, como la de Chang Choy, a un precio económico.
“Hace mucho tiempo que se cobró conciencia de que la industria automotriz es uno de los principales factores que pueden contribuir a materializar la aspiración de Malasia de ser una nación industrializada para 2020”, señala Zulkafli Ghazali, director de Tecnología de Tratamiento por Irradiación de Nuklear Malaysia. “Eso exige que el país tenga capacidad para fabricar cables.” Con su apoyo, el Organismo ayuda al Gobierno a aplicar su plan general para acelerar el crecimiento de las PYME y aumentar su contribución a la economía del 32 % del PIB al 41 % para 2020.
Wonderful Ebeam Cable envía sus productos a la instalación de irradiación de Nuklear Malaysia, situada en centro del país, a unos 300 kilómetros al norte, tres veces por semana. Los cables son devueltos al cabo de unos días, listos para las empresas de automoción.
Nuklear Malaysia trabaja con varias PYME en distintas esferas del tratamiento por irradiación, empleando la radiación ionizante, como radiación gamma y haces de electrones, para modificar las características físicas, químicas o biológicas de los materiales y, así, aumentar su valor y utilidad o reducir sus efectos en el medio ambiente. Se utiliza más ampliamente para la modificación de materiales de plástico y caucho, la esterilización de dispositivos médicos y artículos de consumo, la conservación de los alimentos y la reducción de la contaminación ambiental. Los científicos de Nuklear Malaysia se han beneficiado de varios proyectos de cooperación técnica y proyectos colaborativos de investigación con el OIEA en los que, trabajando con expertos de todo el mundo han podido perfeccionar las tecnologías empleadas en el tratamiento por irradiación. “El OIEA ayuda a transformar los conocimientos especializados mundiales en conocimientos especializados locales”, dice Ghazali.
El OIEA ayuda a los Estados Miembros a reforzar su capacidad de adoptar técnicas basadas en la radiación que favorecen procesos industriales más limpios y más seguros. Nuklear Malaysia ha participado en varios proyectos de ese tipo y está reconocido desde 2006 como centro colaborador del OIEA para el tratamiento por irradiación de polímeros naturales y nanomateriales.
Este artículo se publicó en el Boletín del OIEA de marzo de 2018.