La energía es el motor del desarrollo económico y la prosperidad. Una población en aumento y unas industrias en expansión necesitan más y más de ella. Pero, ¿puede la energía mover las economías modernas sin calentar el planeta ni contaminar nuestra atmósfera? La energía nucleoeléctrica es una opción.
Actualmente produce alrededor del 11 por ciento de la electricidad mundial, prácticamente casi sin emitir gases de efecto invernadero ni contaminantes atmosféricos.