Gracias a la información recopilada durante 25 años, los usuarios de la ITDB pueden examinar todos los incidentes registrados en la base a fin de identificar amenazas, tendencias y patrones comunes que puedan aclarar actividades delictivas relacionadas con material radiactivo y ayudar a los países a determinar mejoras de la seguridad física nuclear. Un patrón que se ha determinado gracias a estos análisis es que alrededor de la mitad de los robos notificados a la ITDB guardan relación con materiales durante su transporte, lo que ha dado lugar a que muchos países mejoren sus sistemas de detección de materiales radiactivos en las fronteras.
“Al analizar la información de la ITDB conocemos mejor cuestiones importantes como los tipos de materiales objeto de tráfico ilícito, las regiones que pueden resultar especialmente afectadas o los patrones de actividad. Son más de 25 años recopilando datos, por lo que disponemos de una cantidad ingente de información en que basarnos para ayudar a reforzar la seguridad física nuclear en el futuro”, afirma el Sr. Purvis. “Toda esta información puede ayudar a que cada país determine la estrategia adecuada para mejorar sus actividades de detección y prevención”.
Por ejemplo, basándose en una serie de informes presentados a la ITDB, en 2018 y 2019 las autoridades pudieron determinar qué sistemas y medidas habían de fortalecer en relación con las fuentes radiactivas presentes en la chatarra; si un artículo que contiene material radiactivo no es objeto de una disposición final apropiada, o se envía a reciclar por error, puede fundirse sin que se tenga constancia de ello y acabar contaminando la chatarra.
En el marco de este caso notificado se hallaron fuentes radiactivas potencialmente peligrosas en contenedores de chatarra en el norte de Europa. Finalmente se recuperaron todas las fuentes, que, desde entonces, están almacenadas en condiciones de seguridad en la instalación nacional de gestión de desechos radiactivos del país de origen. Aunque el caso sigue abierto y los detalles son confidenciales, con la información notificada se concluyó que es muy probable que sigan apareciendo fuentes similares en contenedores de chatarra en el futuro.
“El éxito de la ITDB se debe en gran medida a los informes de incidentes que los países participantes aportan desde hace más de 25 años. Gracias a este apoyo constante, la ITDB seguirá fortaleciendo los esfuerzos mundiales destinados a luchar contra el tráfico ilícito de materiales nucleares y otros materiales radiactivos por medio de la cooperación internacional y el intercambio de información”, señala el Sr. Purvis.